Deja de esperar el momento perfecto

Deja de esperar el momento perfecto

salvador gomez

Una de las trampas más comunes en las que caemos es esperar “el momento perfecto” para actuar. Creemos que cuando tengamos más tiempo, más dinero, más preparación o más confianza, entonces sí estaremos listos. Pero la realidad es que ese momento no existe. Siempre habrá una excusa, un obstáculo o una circunstancia que nos haga dudar.

El problema de esperar es que el tiempo sigue corriendo. Y mientras esperas la perfección, la vida avanza y las oportunidades se van. El momento ideal no es algo que llega: es algo que creas con tus decisiones y acciones.

Empieza con lo que tienes

No necesitas que todo esté alineado para dar tu primer paso. Muchas grandes historias comenzaron en medio de la incertidumbre. Emprendedores que iniciaron con pocos recursos, artistas que empezaron con materiales simples, personas que transformaron su vida con una acción pequeña pero valiente.

Lo que importa no es tenerlo todo, sino atreverse a dar ese movimiento inicial. Ese gesto rompe la inercia y abre nuevas posibilidades que antes no podías ver.

La perfección es un proceso, no un punto de partida

La perfección no está al comienzo, sino al final de un camino de ensayo y error, de constancia y aprendizaje. Nadie empieza sabiendo todo; todos empezamos desde cero. Cada intento, cada error y cada ajuste te acercan más a la versión que buscas.

Si esperas tenerlo todo resuelto antes de empezar, nunca experimentarás el crecimiento que surge del proceso. La experiencia no se adquiere en la teoría, sino en la práctica.

El poder del ahora

Lo único que realmente tienes es el presente. El pasado ya pasó y el futuro aún no llega. El único momento sobre el que tienes control es este instante. Decidir avanzar ahora, aunque sea con un paso pequeño, es lo que marca la diferencia entre quedarse soñando y empezar a construir.

Un ejemplo sencillo: si escribes una página hoy, ya tienes una página más que ayer. Si ahorras una pequeña cantidad hoy, ya estás más cerca de tu meta financiera. Si comienzas a moverte hoy, ya estás creando el hábito que mañana será parte de tu nueva vida.

No necesitas permiso

Muchas veces esperamos la validación de otros para empezar: que alguien nos diga que estamos listos, que el plan es bueno o que tenemos lo necesario. Pero la verdad es que nadie más puede tomar esa decisión por ti. El único permiso que necesitas es el tuyo.

Cuando dejas de buscar aprobación externa y te eliges a ti mismo, recuperas tu poder. Y ese poder es lo que convierte cualquier momento en el momento perfecto para actuar.

Recuerda: El momento perfecto no llega. Lo perfecto se construye a través de la acción, la práctica y la decisión de empezar hoy.

Regresar al blog

Deja un comentario